sábado, 4 de julio de 2009

La CIA atrapada in fraganti en Irán ¿de nuevo?

Esam Al-Amin, CounterPunch, Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens
Viernes, 3 de Jul de 2009. 8:35 pm

Sólo semanas después de los ataques del 11 de septiembre de 2001, Charles Krauthammer, columnista delWashington Post y portavoz de los neoconservadores, reveló la lista de objetivos del gobierno de Bush al iniciar su posición bélica posterior al 11-S. La lista incluía seis naciones: Afganistán, Iraq, Irán, Siria, Libia, y la Autoridad Palestina. Aunque la prioridad asignada a Afganistán y después a Iraq estaba fuera de discusión, el orden de los demás cambiaba continuamente.

A Israel se le dio mano libre para ocuparse de la Autoridad Palestina (AP). El presidente George W. Bush evitó y aisló completamente al presidente de la AP, Yasir Arafat, hasta que éste murió sitiado en noviembre de 2004. Se permitió al ex primer ministro israelí Ariel Sharon que utilizara brutales tácticas militares para aplastar la Intifada de Al-Aqsa, volviendo a ocupar gran parte de Cisjordania, y estableciendo cientos de puntos militares de control que devastaron la vida palestina y lo que quedaba de la AP.

En enero de 2002, la campaña afgana había terminado en lo que respectaba a Bush, y los preparativos para la invasión de Iraq habían comenzado en serio. Docenas de libros han sido escritos explicando en detalle los ardides, complots y engaños de los neoconservadores para el cambio de régimen en Iraq. De hecho, el editor asociado del Washington Post, Bob Woodward documentó los eventos y los roles de altos responsables del gobierno en una serie de libros.

Cuando el dirigente libio Muammar Qadhafi vio el derrocamiento de Sadam Husein de Iraq en la primavera de 2003, inició contactos con Londres y luego con Washington, para tratar de identificar las condiciones necesarias, en un intento por evitar la suerte de Husein. En enero 2004, Libia aceptó todas sus condiciones: aceptación de la responsabilidad por al atentado de Lockerbie, el pago de más de 3.000 millones de dólares en reparaciones, firma del tratado de Prohibición de Armas Químicas, y tal vez lo más importante: renuncia a su programa nuclear, incluida la entrega de todos los equipos comprados durante dos décadas a EE.UU.

continua: http://www.radiomundial.com.ve/yvke/noticia.php?27866

2 comentarios:

Weissman dijo...

Muy buena información.

Esta claro que los de la CIA se ganan el sueldo.... [desgraciadamente para los demás].

-Weissman-

Anónimo dijo...

Por lo que yo sé. Gadaffi aceptó pagar "el chantaje" porque el bloqueo a Libia asesinó a miles de libios, pero nunca aceptó que fuera responsable. Esto es bastante diferente.