El selecto e influyente grupo no invita a cualquiera a sus reuniones privadas, así que los elegidos patrios pueden estar de enhorabuena por poder compartir mesa con la "crème".
8 de junio de 2010
Entre los invitados españoles a la cita, destacaban la Reina Sofía y José Luis Rodríguez Zapatero.
Siempre envuelto en el misterio y la leyenda mediática por la escasez de información que trasciende al respecto, el último encuentro del Club Bilderberg en Sitges (Barcelona) entre el 3 y el 6 de junio ha levantado una gran expectación.
Se dice que su capacidad de influencia es tal que puede "poner y quitar" presidentes de países y hasta desatar guerras y son pocos los periodistas especializados que están al tanto de lo que se cuece.
Precisamente, este grupo de reporteros privilegiados ha tenido acceso a la selecta lista de invitados, de la que se ha hecho eco el diario Público. Como suele suceder con los países que acogen cada una de estas reuniones privadas, la representación española fue más abultada de lo normal y entre los elegidos figuraban, por ejemplo, el presidente ejecutivo de Telefónica, César Alierta, el vicepresidente y comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, la presidenta de Banesto, Ana Patricia Botín, el consejero delegado del Grupo Prisa, Juan Luis Cebrián, el presidente del Grupo Acciona, José María Entrecanales, el director general de La Caixa, Joaquín María Nin, el presidente del Grupo Prisa, Ignacio Polanco, o el vicepresidente del Banco Santander, Matías Rodríguez Inciarte.
También estuvieron presentes Jaime Carvajal Urquijo, managing director de Advent International, Gustavo A. Cisneros, de Organización Cisneros, y el que señalan los especialistas como uno de los últimos "favoritos" del Club Bilderberg, el secretario general de la Presidencia del Gobierno, Bernardino León. Tampoco faltó la Reina Doña Sofía y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
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