jueves, 26 de enero de 2012

Opcion 1 en el golfo persico : una bandera falsa


"¡Recuerden el Maine!", fue el grito en 1898 de la New York Journal de William Randolph Heart, un precursor de la moderna prensa de Murdoch. En ese momento, unos 274 hombres perdieron la vida como consecuencia de la explosión que hundió el USS Maine en el puerto de La Habana. Hearst incluso contó una historia de cómo el enemigo había plantado un torpedo debajo del Maine y lo detonó desde la costa. El único problema fue que eso nunca sucedió. Sin embargo, ese supuesto hecho se utilizó como pretexto popular para la entrada de Estados Unidos en la Guerra Española-Americana y, en última instancia, propició la adquisición de la propia Cuba por parte de E.E.U.U., marcando con ello un hito: el modelo moderno, analizado por muchos historiadores, según el cual se justifica una acción bélica perpetrando previamente una acción militar de bandera falsa.

70 años más tarde, el 8 de junio de 1967, durante la Guerra de los Seis Días, un evento similar tuvo lugar en la costa de Egipto. Podría haber sido: "Recuerda la Libertad", después de un atentado que provocó 34 víctimas mortales y 170 heridos entre las filas estadounidenses, cuando el USS Liberty fue presuntamente atacado por aire y tierra por la Fuerza Aérea y la Marina de Israel. La historia revela ahora que tal acción presuntamente llevada a cabo por Israel, que masacró a la tripulación del USS Liberty, fue diseñada como un atentado de bandera falsa. Afortunadamente Rusia intervino en el último momento, antes de que Israel pudiese hundir el barco “americano”. Si la tramoya hubiese funcionado, podría haber sido utilizada para arrastrar a E.E.U.U. y sus aliados a la invasión de una nueva región, o incluso a una tercera guerra mundial, con quién sabe qué consecuencias.

Si se va a encender un conflicto en el Golfo Pérsico en 2012, es muy probable que E.E.U.U. o Israel utilicen la opción de bandera falsa. Dos razones apoyan esto. En primer lugar, Irán carece de un motivo para querer participar en un ataque suicida contra las potencias del Eje, una acción que sin duda le costaría miles de vidas inocentes y miles de millones en infraestructura. Francamente, resulta razonable pensar que la nación iraní no está en absoluto interesada en realizar cualquier tipo de acción bélica que desate el conflicto. Por el contrario, la historia demuestra que E.E.U.U. e Israel son perfectamente capaces de hacerlo, sirviéndose sin ningún pudor de los autoatentados, es decir, de la estrategia del ataque de falsa bandera, mediante el cual detonan una agresión militar para acto seguido atribuírsela, en este caso, a los iraníes. No olvidemos cómo E.E.U.U. fue capaz de falsificar los prolegómenos de la costosa y sangrienta Guerra de Vietnam, a través del infame incidente del Golfo de Tonkin.

Durante las últimas semanas se ha detectado un incremento importante del tráfico naval de la Armada estadounidense y británica en el Golfo Pérsico. La ironía del poder naval de superficie en el siglo 21 es que sólo resulta útil como "proyección de fuerza". De hecho, el Poder Naval dejó de ser un importante factor geopolítico en juego de poder desde principios del siglo 20, ya que su trascendental contribución al Ejército fue acaparada por la Fuerza Aérea.

La propia Gran Bretaña tuvo que aprender, a la fuerza, tras su penosa participación en la Guerra de las Malvinas en 1982, que con un solo misil Exocet frances se puede hundir un acorazado o un portaaviones. Y desde luego Irán dispone de bastantes más recursos, por lo que, a efectos prácticos, los barcos estadounidenses en la región no son más que el cebo. Es decir, objetivos grandes y lentos, sentados en la agua. Lo cual plantea la pregunta obvia: ¿por qué E.E.U.U. envía al USS Enterprise a la ZONA CALIENTE? Tengamos en cuenta que se trata de un barco que está a punto de ser retirado del servicio, por ser poco más que una ruina, con 50 años a la espalda. ¿Es un señuelo en la línea de fuego en el Golfo Pérsico? No sería de extrañar, desde luego, que ese vetusto y excesivamente grande museo flotante sea el cebo, la víctima propiciatoria. Un barco que, curiosamente, con sus seis reactores en el tablero nuclear, resultaría costosísimo destruir.




Traducido de http://www.prisonplanet.com/persian-gulf-option-one-a-false-flag.html

1 comentario:

Cordura dijo...

Muchas gracias por el esfuerzo de traducir esto, texto y vídeo. Es imperioso difundir al máximo para tratar de parar la agresión en ciernes.

Un abrazo.